jueves, 14 de mayo de 2009

Miradas penetrantes…

Cada mirada produce una reacción en quien la recibe. Una mirada te puede producir alegría, tristeza, angustia, desprecio, pena o tal vez dolor. Las miradas que verán en las fotos que presento en este blog lograron impactar de forma especial mi corazón y espero que en cada una de ellas puedan ver aquello que impactó de forma especial mi vida.



En estos ojos puedo ver tanta dulzura, tanto miedo, tanto dolor y tanto sufrir… Esa mirada constantemente toca las puertas de mi corazón, pidiendo justicia, clamando misericordia, y exigiendo libertad. La vida misma es injusta, el pan del mundo está mal repartido y la sociedad se hace ciega ante el dolor que viven a diario aquellos que no pueden defenderse por sí mismos. Dios te pido justicia divina para aquellos que no pueden levantar su voz en contra de una sociedad que los aprisiona…




Solía ser muy mañosa a la hora de comer. Antes de visitar al Perú no comía casi nada Mi dieta consistía de comida chatarra y de toda una variedad de platos hechos de pollo…. Pero el amor con el que la gente de esta hermosa tierra me invitaba a degustar del famoso ceviche de Piura, el Seco de Chavelo, la causa, el tacu tacu, el frito los domingos en la calle, la famosísima chicha morada, y muchos otros esquistos platos… no podía sino solo aceptar la invitación y enamorarme cada día más del sabor de esta linda tierra. Aquí pueden ver con el gusto que el chico se saborea una rica pata de gallina y en una próxima ocasión les mostraré los deliciosos platos que he llegado a degustar en mi segunda tierra.



Sonrisas como esta, son las que logran que mi corazón quiera pegar un salto de mi pecho para viajar a este lejano rincón de la tierra. Se puede tener un arduo día de trabajo, pasar una tremenda cólera, un inmenso mal rato, y tal vez hasta una leve depresión… pero una sonrisa como esta, logra derretir el corazón del más insensato.



Recuerdo cuando niña… Me ponían un precioso vestido, medias blancas “punto blanco” y zapatos brillosos que resplandecían como el sol. Cuando me disponía a jugar y buscaba el lugar más apropiado para hacerlo; podía escuchar un estruendoso grito: ¡Marie! “Ese traje es nuevo, ni pienses que vas a ensuciarlo con tierra”… Encerrada en el cuerpo de una niña pero no me dejaban actuar como niña, pero en esta foto se pudo capturar la esencia misma de lo que significa ser niña, y actuar como niña. Puedo perderme en la mente mirando esa foto y deseando volver a mi infancia pero así como esta niña: sin miedos, sin inhibiciones, sin complejos, sin preocupaciones, solo disfrutando el momento siendo niña.

¿Qué te dice esta Mirada? No puedo saber que te dice esta mirada a ti pero puedo compartir lo que yo sentí cuando el niño miró a mi cámara al tomar esta foto. Esta mirada me dice: mírame, aquí estoy… No sigas adelante, no pases sin mirar dentro de mí, no pases sin darme una sonrisa, no pases sin preguntar mi nombre, no pases sin decirme buen día… por favor, detente y date cuenta que aquí estoy, que existo, y que te necesito…

No hay comentarios: